Alimentación Energética
La dietética energética, la fitoterapia, la acupuntura y el qigong son las herramientas que tiene la Medicina Tradicional China para restablecer nuestro equilibrio.
La observación del medio, de nuestros cuerpos y órganos, del parecido de cada alimento a los lugares donde nos beneficia y el estudio de sus efectos sobre nuestro organismo son las bases de la alimentación energética. Cada alimento produce un efecto diferente sobre nosotros y cada uno de ellos es capaz de tratar o equilibrar eficazmente nuestros órganos y emociones internas. Si nos paramos a pensar en cualquier otro tratamiento lo utilizaremos durante algunas semanas, a veces meses o incluso años, pero la alimentación (comer) lo haremos como mínimo 3 veces al día durante toda nuestra vida. No hay nada a tan largo plazo y que esté en nuestras manos que saber sobre la mejor alimentación que podemos tener. Comer de manera consciente sabiendo el tipo de alimentos que escoges, cuando lo comes, con qué los mezclas y como los cocinas puede llegar a ser un pilar importantísimo para nuestra salud en nuestro día a día.
Un ejemplo de dietética energética son por ejemplo los frutos rojos; para muchos es sabido que muchos de estos frutos nos pueden ayudar con el sistema circulatorio. Para la dietética energética estimulan la sangre, le dan vivacidad, fortaleza y mayor nutrición y nos pueden ayudar por ejemplo en problemas relacionados con la sangre y sus cualidades; problemas de anemia, cansancio, desintoxican nuestra sangre, ayuda en la mala memoria y concentración, problemas circulatorios, caída y rotura de cabello y uñas, etc...
EJEMPLOS:
Las azukis son muy equilibrantes para los riñones a los que se parecen mucho.
La granada con sus cortes y separaciones internas que tanto se parece a nuestros corazones son un antioxidante para nuestro sistema circulatorio.
La pera, que al partirla nos muestra sus "bronquios" al igual que los pulmones es muy efectiva cuando estamos cayendo en un resfriado. Pera semi cocida con una pizca de miel en su interior nos puede aliviar de la tos y fortalecer nuestros pulmones cuando estamos acatarradas/os.
Las hojas verdes de las espinacas o los mismos espárragos, salen en primavera y ayudan a nuestro hígado a prepararse para la depuración primaveral, que es la estación que responde a éste órgano.
La calabaza naranja con su hueco en el interior y sus pepitas tiene un gran parecido al estómago en su color y en su forma hueca. Este es un alimento regulador para nuestro sistema digestivo y nos ayuda tanto en excesos del estomago como en sus carencias.
